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Osaka y el Belgian Beer Weekend nos dan la bienvenida a Japón

Actualizado: 13 may 2020


Quién nos iba a decir que nuestra primera experiencia en Japón iba a estar relacionada con la cerveza belga. Sin embargo, la casualidad quiso que así fuera. Pero antes de eso tuvimos que dedicar un buen rato en el Aeropuerto de Osaka a realizar los primeros trámites tras nuestro aterrizaje.


En primer lugar, fuimos a recoger el MiFi, un dispositivo a través del cual pudimos disponer de conexión a internet durante todo el viaje. Lo contratamos con Japon Wireless, y todo funcionó a las mil maravillas. Resultó un elemento indispensable, principalmente para poder consultar los horarios de transporte y para obtener información sobre las ubicaciones de los puntos de interés que queríamos visitar.


Por otro lado, fuimos a la oficina de cambio y, por último, a obtener el JR Pass, que nos dio acceso a la mayoría de trenes que tuvimos que ir tomando a lo largo de los 15 días que pasamos en Japón. Además del ahorro económico, en caso de que vayas a moverte mucho en tren, una de las grandes ventajas de este billete es la rapidez con la que puedes acceder a las estaciones. Esto te permite olvidarte de colas y de pararte en cada una de ellas a comprar el billete individual. Fue un acierto, y todo gracias a las recomendaciones que obtuvimos en páginas como Japonismo.


Finalizadas todas estas gestiones, tomamos el Narita Express en el aeropuerto para dirigirnos al hotel. Una vez llegamos, dejamos las maletas en nuestra pequeña habitación del céntrico Osaka Tokyu REI Hotel, que habíamos reservado a través de Booking. Pese al cansancio del vuelo, nos pudieron las ganas de iniciar esta aventura, así que decidimos salir a tener nuestra primera toma de contacto con Japón.

Iniciamos la visita en el moderno edificio Fukoku, del arquitecto francés Dominique Perrault. Una espectacular construcción cuya fachada es un conjunto de cristales orientados en diferentes direcciones.


Continuamos atravesando la espectacular estación de trenes, la cual cruzamos sin parar de fijarnos en la forma de vestir de la gente de Osaka, especialmente los más jóvenes. Nos llamó especialmente la atención la cantidad de mujeres con zapatos de una talla claramente superior a la suya. Es algo que no vimos en el resto de lugares que visitamos en este país. Desde luego, no parece la forma más cómoda de caminar, pero así son a veces las modas; quizá el objetivo es aparentar tener los pies más grandes.


Desde la estación nos dejamos llevar tranquilamente hasta el icónico edificio Umeda Sky, que gobierna el Skyline de Osaka. Es una construcción que destaca por su tamaño, pero que a nosotros no nos acabó de gustar por ser demasiado tosca.


Sin embargo, allí nos encontramos la gran sorpresa del día. Nuestra visita coincidió casualmente con el Belgian Beer Weekend. Sin pensárnoslo demasiado decidimos pasar la tarde allí escuchando música en directo, probando cervezas belgas y observando como los japoneses disfrutan de un evento de este estilo. Nos sorprendió la buena organización del festival, las escasas colas, la gran cantidad de cervecerías representadas (más de 40 distintas) y la higiene que se exige incluso a los clientes, que debíamos limpiar los vasos cada vez que queríamos pedir una nueva cerveza.

Y así fue como las primeras cervezas que probamos en Japón fueron la Cuvée des Jacobins Rouge, de sabor muy ácido, y la Vedett Extra White, una agradable cerveza elaborada con trigo.


Tras informarnos un poco más, descubrimos que este festival cervecero recorre anualmente desde 2010 las ciudades más importantes de Japón entre los meses de Abril y Septiembre. El calendario se puede consultar en la web oficial del Belgian Beer Weekend.


Nos pareció una forma diferente de iniciar nuestra andadura en tierras niponas; un punto de partida que ya nos dio unas pinceladas del carácter de los japoneses, de la forma en que viven y de la forma en que se divierten.


Tras este rato, todavía nos sentimos con fuerzas como para dirigimos a ver algunos templos y a cenar en el famoso barrio Dotombori. Os invitamos a continuar leyendo sobre esta increíble ciudad en nuestro post "Qué ver en Osaka en 2 días".


 

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